
Después de un breve sueño (yo había dormido 3 horas y estaba en números MUY rojos en cuanto a mi necesidad de descansar), fuimos al Canal de Panamá. Lo más impresionante, aparte de la evidente obra de ingeniería que es, es el hecho de que fue construído hace unos 100 años, cuando Panamá era una selva tupida... y el canal sigue funcionando hasta hoy (como dijo el guía turístico: si uno le da mantenimiento a las cosas, pueden durar para siempre).
Almorzamos en el restaurante del canal, y un nica le pegó un rodillazo a una puerta de vidrio (ver foto). Por dicha ni salió herido, ni se la cobraron, sólo fue el susto. Es también muy interesante ver un crucero de pi toneladas pasar por un canal con un margende error de 50cm...
Luego fuimos a comprar artesanías, y después a unas islas (unidas a tierra por un istmo transitable en cualquier vehículo) que parecían Miami, y donde vi los yates más grandes que he visto en mi vida... se parecían a mi yate :p
También visitamos Panamá Viejo, y mi cabeza empieza a preguntarse ¿por qué Cristo Rey (San José, CR) no puede aspirar a algo similar? En esencia, son la misma cosa: un barrio bajo interesante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario